Que el Señor les continué bendiciendo, chicos. Continuamos con la serie Teología del Liderazgo...
Así pues, veamos lo que dice la
Palabra de Dios sobre el Liderazgo en Mateo
20:20-28. Por el pastor Jesús Martínez.
Las verdades compartidas por el Señor Jesucristo en este pasaje
son:
El modelo de autoridad que
usan los gobernantes de las naciones no será el mismo que usaran los líderes de
la Iglesia local.
Por el contrario, los que
quieran tener lugar de preeminencia en la Iglesia serán servidores de los demás
El modelo de liderazgo a
seguir para dirigir la Iglesia es el de Cristo, quien vino para servir y no
para ser servido.
El servicio de Cristo estuvo
motivado por el amor a los demás hasta el punto de morir para salvar a la humanidad.
El motivo de Cristo no fue obtener la preeminencia o el enseñoramiento
sobre los demás, sino el servicio por amor.
El modelo
de liderazgo que impera en Latinoamérica es el del “hombre fuerte” o el de
caudillo. El cual consiste, en que la
autoridad es ejercida en lo absoluto por un solo individuo; nada sucede, sino
se tiene su aprobación. Al estar presente esta forma de liderazgo en la Iglesia
local, indica que toda la organización camina en función de la visión que marca
el líder, que por cierto no es una visión surgida de un esfuerzo o conciencia
colectiva, por el contrario, es la visión del líder que es asumida por la
organización; en consecuencia, para que
funcione la institución el líder caudillo es indispensable. Los líderes nuevos solo pueden coexistir si
están bajo la cobertura o sumisión al líder principal y lo hacen no como
colaboradores o colegas; sino como sus fieles e incondicionales subalternos.
Lo dicho en párrafo anterior
constituye una fotografía exacta del modelo de autoridad que usan los
gobernantes de las naciones del cual
Jesucristo dijo que este modelo, no será
el mismo que usaran los líderes de la Iglesia local. El Señor dijo a sus
seguidores sobre tal modelo “No será así
entre vosotros, sino el que quiera llegar a ser grande entre vosotros, será
vuestro servidor.” (Mt. 20:26).
Visto así el líder siervo, es
uno que enfoca su ministerio en función del servicio a los demás y no en
función del enseñoramiento, o ejercicio de la autoridad para someter a los demás para
que le sirvan o para que ejecuten ciertas tareas. El líder siervo, tiene como motivación de su
ministerio ayudar a las personas a que solucionen sus necesidades, lograr la
madurez de los creyentes y todo por amor a ellos y por obediencia a su líder,
Jesucristo.
En este sentido, el liderazgo
transformacional se corresponde más con el modelo propuesto por el Señor para
el liderazgo cristiano, según lo estudiado en este caso a la luz del texto
bíblico de Mt. 20:20-28. En este modelo, la visión es corporativa y las
personas son lo más importante; por tanto, el líder procura que ellas
encuentren su forma para incorporarse en el ministerio y aprendan a servir al
Señor a la vez que maduran en la fe e
invierten energías en una visión
corporativa y no la de un
individuo.
PASTOR, JESÚS MARTINEZ;
Profesor Universitario; Estudios Teológicos en el
Instituto Bíblico Ebenezer.
Lcdo en educación y Abogado; Maestría en
Orientación de la Conducta.
Venezuela Estado Falcón