domingo, 23 de abril de 2017

Serie Obedeciendo: María, una Joven Obediente



Hola Chicas, que el Señor les bendiga. En las entradas anteriores estuvimos estudiando varios ejemplos de obediencia citados en la Biblia. Hoy finalizaremos esta serie con el ejemplo de María, la madre del Señor Jesucristo.

María fue una joven que se dispuso a obedecer. En Lucas 1:26-38 nos narra como fue que María supo de que seria la madre del Señor Jesús, siendo ella virgen. El Ángel le dice: El Señor está contigo, está contigo para bendecirte,para distinguirte. Si Dios está con nosotras no debemos temer a los enemigos ni pensar que se es incapaz para hacer lo que a cada quien Dios ha encomendado. 
En el verso 29 Vemos que Marìa se turbó por el alcance de las palabras del Ángel, mas no por la presencia del mismo, conciente de que no merecía el honor que se le atribuía. 

Ya en el verso 30, el Ángel Gabriel continúa hablando y dice:" Deja de temer, porque has hallado gracia ante Dios", como si dijese
:" Si Dios te ha conferido un favor tan especial, mayor de lo que tú merecer, no sigas temiendo, pues el que está contigo en el favor, estará contigo con su poder infinito.
En el Verso 38 María dice: "He aquí, la esclava del Señor, es decir: " Señor, estoy completamente a tu servicio, dispuesta a obedecerte, y dejo este asunto en las manos tuyas", y María se somete a la voluntad de Dios. Ella se puso a total disposición, entendió que era una sierva del Señor. 

Alguien con esperanza en el favor divino, no solo se contenta de lo que Dios va hacer, sino que desea humildemente que así se realice. 
Tiene que ser nuestro deseo como el de María, que se dejó guiar por Dios, obedeció y creyó en lo que Dios tenía preparado para ella.

¡Dios les sorprenda!

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